APRENDER ARQUITECTURA

SABER CONSTRUIR
La construcción es la materialización de una idea. No es un proceso
espontáneo o gratuito, responde a propósitos muy particulares.
Construir es concretar decisiones, afirmarlas, darles cuerpo. La
posibilidad se vuelve realidad mediante la acción constructiva. Al
mismo tiempo, la construcción se constituye en un saber que posibilita
la formación y el desarrollo de las ideas.
La especie humana es la constructora por excelencia.
Saber construir es un conocimiento cultural, hace parte del saber colectivo que permite que un grupo humano se provea de espacio habitable. Saber construir hace parte del equipo básico de la supervivencia humana.
El arquitecto debe saber cómo se sostienen las edificaciones,
cómo se ensamblan entre sí sus partes, cómo se comportan
estructural y estéticamente los materiales y cómo se relacionan entre
sí en el acabado de la obra.
El texto de Lorite Mena aclara la coexistencia de la orientación y de
la construcción, pero no determina la prioridad de una cosa sobre
la otra. Eso es comprensible; el sentido común indica que la una y
la otra son complementarias, que cada una posee su propia esfera
de entendimiento y que la arquitectura, como hecho concreto, no
puede ni debe existir sin la unión de ambas partes.
La técnica es un saber colectivo que se arraiga y se desarrolla en un
contexto cultural.
En el mundo industrializado la construcción en su conjunto está
organizada con base en un alto grado de industrialización, sistematización
de elementos, mecanización del trabajo y especialización
de la mano de obra.
La construcción de la arquitectura es un asunto relativamente sencillo
de explicar y de entender. El espacio arquitectónico, como tal,
requiere de soportes, cerramientos y coberturas, de divisiones internas
y de vacíos para la intercomunicación. Cimientos, columnas
y muros, entrepisos y techumbres son los elementos básicos que
han construido los espacios arquitectónicos en diversos lugares y
momentos. Cada uno de ellos asume múltiples formas, se realiza
en distintos materiales, las combinaciones entre ellos son casi infinitas.
Saber construir se expresa en los planos que el arquitecto elabora y
entrega como instrucciones precisas para la construcción.
El plano técnico es el plano arquitectónico por excelencia, es la partitura
definitiva que permite que se realicen las cosas. En el plano técnico
están presentes las ideas espaciales y estéticas, el saber constructivo,
el conocimiento de materiales y técnicas, el sentido del detalle y
la responsabilidad del profesional de la arquitectura. Un buen juego
de planos constructivos es la condensación sintética del saber
del arquitecto.


